Todas deberíamos tener un vestido negro corto en nuestro armario. Ofrécela posibilidad de usarlo en múltiples ocasiones.
Es apropiado para el trabajo, actividades semiformales de tarde, o eventos más elegantes como fiestas o una boda y hasta para ir a una discoteca; todo dependerá de los accesorios que utilices.
Es importante que tenga un corte liso sin vuelos o muchos adornos, que permita hacerle cambios con accesorios que lo hagan lucir diferente y preferibemente, de manga corta o sin manga, así lo puedes usar tanto en verano como en invierno.
No necesitas un montón de ropa para lucir diferente, a la moda y chic. Con algunas piezas extras podrás convertir tu vestido negro en diferentes y perfectos looks.
Se utilizaron algunas piezas para formar 10 looks diferentes: Una chaqueta de color neutro, que es otra de las piezas claves en un ropero por su versatilidad ya que puedes usarla desde una falda de seda hasta con unos jeans, una chaqueta gris con negro, dos blusas, una manta, un sweter, tres pañuelos, tres pares de zapatos diferentes – negro, rojo y beige- un collar, una cadena, dos cinturones, dos pares de lentes de sol, tres pares de aretes y dos carteras.
Todas son prendas que seguramente tienes en tu clóset, por lo que tu misma puedes hacer tus propias combinaciones.
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