Los puntos negros son uno de los problemas de belleza más comunes y molestos, ya que se presentan en el rostro, especialmente en la nariz y la barbilla y aparecen en todo tipo de cutis, no solamente en los grasos.
Ocurre cuando los poros se obstruyen por la transpiración de las glándulas sebáceas entonces, esta grasa y la queratina se oxidan y producen una especie de punto de negro que consiste en un orificio de color oscuro.
Para mantener los punto negros lejos de nuestra cara es necesario una rutina de limpieza constante, de otra forma, aparecen otra vez.
Una rutina de belleza que incluya una limpieza diaria, retirar el maquillaje todas las noches y exfoliar la piel una o dos veces por semana, terminando con una mascarilla.
Primer paso – La extracción
Lo mejor para extraer los puntos negros es el uso del vapor, conseguirás abrir los poros y limpiarlos de manera sencilla.
Coloca en una olla, agua limpia si tienes a mano, puedes añadirle manzanilla o romero. Haz que hierva el agua y apaga.
Coloca tu rostro sobre la olla para que el vapor te llegue directamente a la cara. Cúbrete con una toalla, así conseguirás que el vapor llegue de manera directa y no se escape por los lados. Aunque es bastante incómodo, permanece bajo el vapor durante unos minutos para que los poros se abran un poco y el sebo se ablande.
Luego, usando un paño limpio o gasa aprieta la zona, tratando de retirar los puntos negros, trata de no dejar marcas con las uńas. Después que lo hayas hecho sólo con tus dedos, coloca un poco de sal fina en la piel humedad y masajea haciendo presión, la sal puede penetrar mejor en el poro facilitando la extracción. Cuando notes que la piel esta enrojeciendo termina el proceso, pasando hielo envuelto en un pańo limpio o servilleta de papel, para evitar el contacto directo con la piel, para cerrar los poros.
Puedes repetir esta operación cada dos o tres días hasta que los poros estén limpios.
Segundo paso – Exfoliación
Puedes utilizar algunas de estas mascarillas para exfoliar la piel una o dos veces a la semana.
1- Sal y aceites
Ingredientes:
- ½ taza de sal de grano fina
- 1/3 de taza de aceite de jojoba, almendra o coco
- 1 cucharada de lavanda seca
Primero debes mezclar la sal con el aceite Una vez que esté bien incorporada agrega la lavanda y mezcla muy bien. Aplica en la piel dando un suave masaje. Enjuaga con agua templada.
2 – Banana y azúcar
Ingredientes
- 1 banana madura
- 2 cucharadas de azúcar gruesa
- 1 cucharadita de aceite de almendras
Mezcla muy bien todos los ingredientes hasta obtener una pasta viscosa. Aplícala sobre la piel y realiza masajes circulares durante algunos minutos. Enjuaga con agua fría.
3- Arcilla y miel
Ingredientes
- 1 taza de de avena
- 1 taza de arcilla blanca
- 1 / 2 taza de miel
Mezclar todos los ingredientes hasta hacer una pasta homogénea. Colocar la mezcla en un frasco y mantener refrigerada. Cuando la vayas a usar retira una cucharada de la mezcla. Aplica generosamente sobre el rostro y masajea. Déjala por unos 20 minutos y retira con agua templada.
Tercer paso – Cerrar los poros
Para ayudar a cerrar los poros, aplica una de estas recetas, ligeramente astringentes, luego de que hayas exfoliado la piel. Si tienes el cutis graso, aplícalo en el rostro completo, de otra forma, sólo hazlo en la parte donde se presentan los puntos negros
1- Mascarilla de pepino
Licua medio pepino y unta ese jugo sobre la piel. Déjala por 10 minutos y retira con agua fría.
2 – Mascarilla de clara de huevo y limón
Bate una clara de huevo con 3 gotas de limón, aplica la mezcla sobre el rostro limpio y déjalo actuar durante 15 minutos, posteriormente enjuaga con agua fría.
3 – Mascarilla de zanahoria y yogurt
Coloca una zanahoria en el extractor o rállala y mezcla este jugo con una cucharada de yogurt y aplica por 10 minutos. retira con agua fría.
Fotografía; Manzelle KitKat
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